Una impresionante modelo de Playboy afirma que se siente “virgen” después de que la pandemia le impidió tener citas, tener relaciones sexuales o incluso besar a hombres.
Iasmin Santos, de 27 años y con más de 31.000 seguidores en Instagram, participó en una nueva sesión de fotos en la que dejó ver sus envidiables curvas.
En una instantánea, lleva un glamoroso vestido dorado ceñido que abraza su figura y muestra sus tatuajes.
Mientras que en otro, combina una chaqueta amarilla estilo piel de serpiente con un par de botas hasta los muslos y nada más: seguramente calentará a la gente.
Pero, detrás de escena del rodaje, Iasmin reveló que ha estado sin besar ni tener relaciones sexuales durante más de un año debido a la pandemia.
Y planea perder su “virginidad del beso” el 13 de abril, el Día del Beso.
Según la modelo, pasar tanto tiempo sin besarse le hizo recordar lo ansiosa que estaba por el primer beso en su adolescencia.
Iasmin se rió: “Mi boca es virgen”.
“Cuento los días, para mí no habría nada más romántico”, declaró.
El Día Internacional del Beso se celebra el 13 de abril y las celebraciones son un símbolo de cariño romántico o amistad, según el país.
Iasmin dijo: “Celebrar esa fecha ya era una tarea muy sencilla y placentera”.
La brasileña, que vive en Londres, afirma que está detrás de un hombre que ha sido vacunado para besarse cuando se levante el encierro, y con su nuevo look seguramente lo logrará.
Anteriormente, Iasmin se sometió a una cirugía plástica por valor de £32,000 y dijo que la hizo sentir como una “persona nueva”.
El procedimiento que marcó la mayor diferencia en su rostro se llama “Fox Eyes”: levanta las cejas y las esquinas exteriores de los ojos para darle una apariencia de zorra.
Iasmin dice que ha tenido un “efecto increíble” en su apariencia.
La modelo también ha tomado medidas extremas para conseguir la figura que desea, incluido el uso de un corsé las 24 horas del día para reducir su cintura.
La belleza comentó: “Me inspiro mucho en Kim Kardashian: mi sueño es tener el mismo cuerpo que el de ella.
“Pero por ahora me estoy centrando en mi cintura y creo que somos casi iguales. Y eso de que nos comparen con una muñeca, ¿a quién no le gusta?”
